Empleados con discapacidad del CMDLT celebran su día y comparten su testimonio de vida

Empleados con discapacidad del CMDLT celebran su día y comparten su testimonio de vida

Este 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha que este año, por directriz de las Naciones Unidas, aboga por la inclusión, el acceso y empoderamiento de estas personas con talentos y habilidades especiales.

Se calcula que mil millones de personas en el mundo viven con algún tipo de discapacidad y enfrentan muchas barreras para lograr su incorporación en aspectos sociales clave como el transporte, el empleo y la educación. Promoviendo oportunidades reales para que estas personas potencien sus destrezas, se conviertan en agentes de cambio y disfruten del ejercicio pleno de sus derechos, el Centro Médico Docente La Trinidad, de la mano de organismos aliados como la Asociación Civil Buena Voluntad, abre cada día más espacios laborales a quienes con esfuerzo y dedicación trascienden sus limitaciones para construir país. En ocasión de la fecha, cuatro de ellos comparten su testimonio:

 

 

Elías Solórzano, 22 años

Discapacidad intelectual-cognitiva moderada

Auxiliar de Oficina, Gerencia de Hotelería / 10 meses en el CMDLT

“Me encanta conocer gente nueva y prestar apoyo a quien lo necesita. Y lo que más me gusta de mi trabajo es que me brinda la oportunidad de hacer las dos cosas. Trato de ayudar a que los pacientes pierdan los nervios, a que se relajen, pero sin incomodarlos: converso con ellos, les cuento chistes, los hago reír. Soy muy hábil para interactuar con las personas y hacer amistades rápidamente. Yo no me siento diferente, me considero una persona normal, común y corriente, y eso es algo que viene desde adentro. Uno primero tiene que valorarse y sentirse igual que los demás para después demostrarle al mundo que uno puede incorporarse, echar para adelante, crecer, superarse, indistintamente de la discapacidad”.

 

 

Johan España, 28 años

Discapacidad músculo-esquelética grave

Auxiliar de Oficina, Farmacia / 7 meses en el CMDLT

“Soy bueno con los números y con las actividades que requieren memoria y retentiva. Mi experiencia laboral me ha permitido desarrollar esas habilidades y aprender muchas otras cosas que no conocía. Puedo decir que mi trabajo me ha fortalecido infinitamente. Además me llevo muy bien con todos mis compañeros. En el CMDLT me he sentido como en familia. Somos una familia. Todo lo que hago aquí lo disfruto y me llena de satisfacciones. Por eso mi consejo a todas las personas con discapacidad es que luchen por sus metas, así como yo estoy luchando por sacar adelante a mi hijo, Carlos Manuel. Que busquen porque siempre hay un espacio para ellos, así como aquí hubo un espacio para mí. Para todos hay lugar en este mundo”.

 

 

Carlos Lepervanche, 30 años

Discapacidad físico-motora / cognitiva

Mensajero Interno, Departamento de Historias Médicas / 3 años en el CMDLT

“Me gusta cantar. A mí me llaman el cantante del CMDLT. Y escribir. Estoy escribiendo un libro autobiográfico. Pero lo que hago día a día en mi trabajo también me hace sentir feliz, porque me permite cumplir con mi sueño, que es poder ayudar a otros. Yo tuve un accidente a los 6 años y desde entonces me ha ayudado tanta gente que de una u otra forma tengo que devolver ese apoyo. Quizás no a las personas que me auxiliaron, pero sí a quienes hoy más lo necesitan. Y aquí he podido hacerlo. El CMDLT es tan grande que hay personas que se pierden y yo, en vez de explicarles dónde queda lo que están buscando, los llevo hasta el lugar. Aquí somos un equipo, hay mucho compañerismo. Lo que te importa a ti, le importa al que tienes al lado. La vida es una sola y si estamos aquí es por algo. El peor obstáculo del hombre es la mente, que te dice que vas a sacar cero en el examen. Y al final pasas el examen, y a veces sacas 20”.

 

 

Tahiris Chacón, 38 años

Discapacidad músculo-esquelética

Analista de Soporte de Piso, Ginecología y Obstetricia / 4 años en el CMDLT

“Soy publicista y me encanta la actuación y hacer doblajes de voz. Sin embargo, aunque soy parte del grupo de teatro del CMDLT, trabajo en algo que no tiene nada que ver con eso: recibiendo a los bebés que llegan al mundo. Y me encanta. Fue una oportunidad que tuve de ascender profesionalmente pero también de crecer personalmente. Aquí se aprende y se trabaja en equipo y con mucha humanidad por pacientes que no siempre están de buen humor o con una sonrisa. Parte del trabajo es hacerlos sentir mejor. Pienso que todo en la vida se puede. Yo nunca hablo de impedimentos, prefiero hablar de una limitación. Tal vez no podemos hacer las cosas de la misma forma en que las hacen los demás, pero podemos hacerlas de una manera distinta. Al final, no hay discapacidad que te prive de ser lo que quieres”.

 

Caracas,  noviembre 2015

Lena  Jahn Santorufo
CNP 21837
lena.jahn@cmdlt.edu.ve